Los calambres y espasmos musculares pueden aparecer en los peores momentos: al dormir, hacer ejercicio o incluso al estar sentado. En lugar de recurrir a medicamentos sintéticos, podría considerar relajantes musculares naturales. Estas opciones no solo alivian el dolor, sino que también favorecen la salud general de los músculos y nervios sin efectos secundarios graves.
1. Magnesio
El magnesio desempeña un papel fundamental en la función muscular. Una deficiencia puede provocar calambres y espasmos. Consumir alimentos ricos en magnesio como espinacas, almendras, aguacate y chocolate negro puede ayudar, o bien, puede probar suplementos de magnesio después de consultar con un médico.
2. Té de Manzanilla
La manzanilla contiene 36 flavonoides con propiedades antiinflamatorias. Beber una taza caliente de té de manzanilla puede relajar el sistema nervioso y aliviar la tensión muscular.
3. Cúrcuma
La curcumina, el compuesto activo de la cúrcuma, actúa como un antiinflamatorio natural. Añade cúrcuma a tus comidas o mézclala con leche tibia para calmar los músculos adoloridos o con calambres.
4. Aceite de menta
Aplicar aceite esencial de menta tópicamente puede proporcionar un efecto refrescante y ayudar a relajar los músculos tensos. Su contenido de mentol también ayuda a mejorar la circulación sanguínea.
5. Baño de sales de Epsom
Sumergirte en un baño tibio con sales de Epsom permite que el magnesio se absorba a través de la piel, reduciendo la rigidez muscular y mejorando la relajación.
6. Raíz de valeriana
La valeriana se usa a menudo para mejorar el sueño, pero también actúa como un relajante muscular natural. Calma el sistema nervioso y puede aliviar la tensión muscular.
7. Aceite esencial de lavanda
El aceite de lavanda tiene propiedades calmantes y antiinflamatorias. Masajearlo en las zonas con calambres o añadirlo a un baño tibio puede aliviar las molestias y favorecer un sueño reparador.
8. Aceite de CBD
El cannabidiol (CBD) interactúa con los receptores del cuerpo para reducir el dolor y la inflamación. Puede ayudar a relajar los músculos y controlar el dolor crónico, especialmente cuando se aplica tópicamente. 9. Alimentos ricos en calcio
El calcio ayuda a que los músculos se contraigan y relajen correctamente. Los lácteos, las verduras de hoja verde y los alimentos fortificados pueden complementar la ingesta de calcio y prevenir los espasmos.
10. Compresa tibia
Aplicar una compresa tibia en la zona acalambrada aumenta el flujo sanguíneo y ayuda a que los músculos se relajen de forma natural.
11. Compresa fría
Si un calambre muscular se debe a una lesión o inflamación, una compresa fría puede reducir la hinchazón y aliviar el dolor agudo.
12. Estiramientos y yoga suave
Los estiramientos o el yoga regulares pueden aliviar la rigidez y prevenir futuros calambres, manteniendo los músculos flexibles.
13. Jugo de cereza ácida
Las cerezas ácidas contienen antioxidantes y compuestos antiinflamatorios. Beber jugo de cereza ácida después del entrenamiento puede acelerar la recuperación y reducir los calambres.
Conclusión
Si bien los calambres ocasionales son comunes, los problemas musculares crónicos o graves deben consultarse con un profesional de la salud. Estos remedios naturales pueden ofrecer alivio y promover la salud muscular, especialmente cuando se combinan con hidratación, una dieta adecuada y actividad física ligera.