Cuando nos sentimos cansados y sin energía, nuestra primera reacción suele ser tomar un café. Las bebidas energéticas son otra solución común. Una de las bebidas más famosas, Red Bull, incluso se considera una bebida que nos “da alas”.
La popular bebida energética Red Bull se ha relacionado con problemas cardiovasculares, como accidentes cerebrovasculares e infartos.
Red Bull endurece la sangre y proporciona al cuerpo una estimulación artificial.
Una hora después de beber una sola lata de Red Bull, la consistencia de la sangre de los participantes del estudio se volvió anormal y se asemejaba a la de un paciente cardíaco, según informó Scott Willoughby, investigador principal del Centro de Investigación Cardiovascular del Hospital Real de Adelaida en Australia.
Los principales componentes de Red Bull son la cafeína y el azúcar. También contiene aspartamo, un edulcorante artificial con efectos neurotóxicos, metabólicos, alérgicos y cancerígenos. El fabricante original de Red Bull en Austria incluso recomienda a sus clientes no beber más de dos latas al día.
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Además de los efectos negativos relacionados con su alto contenido de cafeína, Red Bull contiene varias sustancias químicas que aún no se han estudiado adecuadamente. Mucha gente lo mezcla con alcohol, lo que aumenta los posibles peligros. Esta combinación puede sobrecargar el cuerpo y provocar graves problemas de salud. Entonces, ¿qué opción queda cuando se consumen cantidades excesivas de bebidas con cafeína?
Muchos expertos recomiendan hacer lo siguiente para aumentar tus niveles de energía:
– Mejorar tu alimentación
– Consumir más ácidos grasos omega-3
– Consumir menos azúcar
– Disminuir tu nivel de estrés
– Dormir lo suficiente y con calidad
– Hacer ejercicio con regularidad