Quizás hayas notado pequeñas manchas rojas en tus brazos o en otras partes de tu piel y las hayas ignorado. Pero ¿sabías que estos pequeños puntos podrían ser señales de algo más grave que está sucediendo dentro de tu cuerpo?
Si bien algunas manchas rojas son inofensivas, otras podrían ser la señal de alerta de tu cuerpo. Saber qué buscar puede ayudarte a actuar a tiempo y posiblemente prevenir problemas de salud mayores en el futuro.
¿Qué son realmente estas manchas rojas?
Estas pequeñas manchas rojas a menudo se llaman petequias. Son pequeños puntos del tamaño de una aguja que aparecen cuando los pequeños vasos sanguíneos debajo de la piel se rompen y pierden sangre. No desaparecen al presionarlos y pueden aparecer repentinamente o extenderse con el tiempo.
También pueden ser angiomas capilares, que son lunares rojos brillantes causados por el crecimiento excesivo de los vasos sanguíneos. Estos suelen ser inofensivos, pero hay ocasiones en las que las manchas rojas no deben ignorarse. Causas comunes (inofensivas) de las manchas rojas:
Esfuerzo: Al toser, vomitar o levantar objetos pesados.
Envejecimiento de la piel: A medida que envejecemos, la piel se vuelve más fina y más propensa a sufrir daños en los vasos sanguíneos pequeños.
Pero a veces, son una señal de alerta de algo más grave:
Deficiencias vitamínicas: La falta de vitamina C o K puede provocar fragilidad en los vasos sanguíneos.
Trastornos autoinmunes: Afecciones como el lupus o la vasculitis pueden causar inflamación de los vasos sanguíneos.
Infecciones: Infecciones graves como la meningitis o la faringitis estreptocócica pueden provocar la aparición repentina de manchas rojas.
Trastornos sanguíneos: La leucemia y otros problemas de coagulación pueden provocar petequias inexplicables.
Efectos secundarios de los medicamentos: Los anticoagulantes o ciertos antibióticos pueden causar manchas en la piel.
¿Cuándo debería consultar a un médico?
⚠️ Si las manchas rojas:
Se propagan rápidamente
Se acompañan de fiebre o fatiga
No desaparecen después de unos días
Aparecen con hematomas o sangrado de encías
Se presentan con mareos o dificultad para respirar
Es hora de buscar ayuda médica. Estos síntomas pueden indicar una afección sanguínea o inmunitaria subyacente.